La retirada, hace unas horas, de la “ley del aborto”, por
parte del Presidente del Gobierno, me deja absolutamente perpleja por
las razones que ha alegado para ello. Parece que no puede sacar adelante
una ley porque no tiene el consenso suficiente y porque, de esta
manera, aunque entrara en vigor, en cuanto no estuviera el PP
gobernando, se derogaría y se volvería a cambiar.
El señor presidente habla como si todas las leyes que ha emitido este gobierno hubieran sido consensuadas y creo, si no me equivoco, que en estas condiciones de diálogo y acuerdo no ha salido ni una. Especialmente, refiriéndonos a educación, hay que destacar que la LOMCE, ciertamente, ha conseguido un consenso total de todos los partidos, excepto el PP, para derogarla en cuanto lleguen al gobierno. Consenso en contra, eso sí, pero consenso al fin.
Resulta increíble la incoherencia de un gobierno que, en función de sus intereses electoralistas, da razones blancas y negras para justificar lo injustificable.
Esperemos que, al menos, el consenso en torno a la LOMCE se cumpla cuanto antes.
El señor presidente habla como si todas las leyes que ha emitido este gobierno hubieran sido consensuadas y creo, si no me equivoco, que en estas condiciones de diálogo y acuerdo no ha salido ni una. Especialmente, refiriéndonos a educación, hay que destacar que la LOMCE, ciertamente, ha conseguido un consenso total de todos los partidos, excepto el PP, para derogarla en cuanto lleguen al gobierno. Consenso en contra, eso sí, pero consenso al fin.
Resulta increíble la incoherencia de un gobierno que, en función de sus intereses electoralistas, da razones blancas y negras para justificar lo injustificable.
Esperemos que, al menos, el consenso en torno a la LOMCE se cumpla cuanto antes.
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