El Barómetro Audiovisual de
Andalucía 2014 confirma la pujanza de las redes sociales como puerta de
acceso a la información en internet, cuya función como medio para el
entretenimiento también despega
Uno de cada tres hogares andaluces con menores de 13 años
no impone reglas o límites al visionado de la televisión, tampoco
existen normas en estas familias para el uso de internet por parte de
los más pequeños de la casa, según desvela el Barómetro Audiovisual de
Andalucía 2014, que han presentado hoy la presidenta del Consejo
Audiovisual de Andalucía, Emelina Fernández Soriano, y la consejera
Cristina Cruces.
El Barómetro Audiovisual de Andalucía, única encuesta de este tipo
por temática y tamaño de la muestra (2.450 entrevistas) que se realiza
en la Comunidad, analiza la relación y el uso de los andaluces respecto
de los medios de comunicación. En esta edición, la séptima desde que en
2008 el CAA iniciara la publicación de estos estudios de opinión, se
constata la imparable competencia de internet como medio para el
entretenimiento y la información sobre el resto, sobre todo la
televisión.
No obstante, aun es la televisión el medio con mayor índice de
penetración social: el 98,7% de los encuestados dijo verla a diario,
frente al 62,8% que entra en internet por motivos distintos al trabajo, o
el 60,2% que escucha la radio todos los días. Es además el medio con
más horas de consumo de promedio: tres horas, frente a las dos horas
diarias que los encuestados dicen escuchar la radio, y también dos horas
que dicen navegar en internet.
En esta edición del Barómetro se ha profundizado en el uso de los
medios de comunicación en los hogares donde residen menores de edad.
Así, frente al 30% de hogares con niños y niñas de menos de 13 años en
los que no se imponen normas para el ver la televisión, en el 70%
restante, donde sí se aplican métodos de control parental, la fórmula
más frecuente es limitar el horario de visionado, según dijo el 69% de
los encuestados. Un método que se combina con el acompañamiento a la
hora de ver los programas de televisión (30%) y a la selección del canal
que ve el menor.
En cuanto al control de los horarios, la mayoría de las familias con
menores de 13 años fija las diez de la noche como hora límite para que
estos estén frente al televisor, si bien existe un 21% que admite el
visionado hasta las once de la noche. En fin de semana, estas horquillas
se amplían: el 38,4% permite a sus hijos menores de 13 años ver la
televisión hasta las once de la noche, y un 20% hasta las doce. Sólo un
16% mantiene en las 22 horas el límite.
La mayor parte de los hogares andaluces (69%) cree que protege de
forma eficaz a sus hijos menores de los contenidos a los que acceden a
través de diversas pantallas. No obstante, un 16,5% ve imposible
controlar lo que ven. De hecho, en el uso de internet, un amplio
porcentaje de hogares con niños (47%) establece límites horarios como
medida de control. Un 48,3% señaló el acompañamiento a sus hijos en la
navegación por la red, un 23,4% pone o induce la web que estos visitan y
un 11% se decanta por dispositivos de control parental.
Los contenidos de televisión que se consideran inadecuados para los
menores, la violencia, brutalidad o agresiones encabezan las respuestas
(74,3%), seguida de los insultos, peleas o gritos (43,5%), los
contenidos de carácter sexual (38,6) y lenguaje soez (30%).
Un 72,7% cree que los informativos mezclan información con opinión
La televisión sigue siendo el medio preferido por la audiencia andaluza
para acceder a la información, si bien, registra un descenso sostenido
en los últimos años. En 2014 el 49,3% de los encuestados eligió este
medio para informarse, 14 puntos menos que en 2007. En contraste con
esta tendencia, se constata el avance de internet como primera elección
para informarse que ha crecido 18 puntos en las preferencias de los
andaluces en los últimos siete años, hasta acaparar la atención
informativa del 25,5% de la población. La radio se mantiene, con el 13%.
Pese a este liderazgo del papel informativo que se adjudica a la
televisión, las opiniones de los andaluces son muy críticas en este
aspecto: una inmensa mayoría, el 72,7%, piensa que los informativos
televisivos mezclan información y opinión sin distinguir o separar
ambas. Sin embargo, más de la mitad de los encuestados (53%) dice
sentirse bien informado.
La posición de los andaluces respecto al pluralismo político en radio
y televisión es también muy crítica: el 61% cree que no se cumple este
principio constitucional, y un 45,7% responde que la radio tampoco lo
respeta. El 27% suspende a la televisión en el cumplimiento de la
objetividad informativa, un 24,4% la valora suficiente, y un 37,6% la
valora de forma positiva. La radio obtiene menores resultados en este
caso: un 50% la valora positivamente, un 12,8% suficiente y otro 12,5%
la suspende.
La televisión también es el medio preferido por los andaluces para
entretenerse, a mucha distancia del resto: el 56,3% de los encuestados
la escoge en primer lugar, si bien, baja 11 puntos desde 2007. Internet
mantiene su avance en este sentido, y es el medio predilecto de
entretenimiento para uno de cada cuatro andaluces (23,5 puntos más que
hace siete años), y en la siguiente posición se sitúa la radio,
seleccionada por el 10,7% de los encuestados, diez puntos menos desde
2007.
Los contenidos televisivos más seguidos por la audiencia andaluza son
informativos (59%), ficción (47,2%), y entretenimiento (40%) y
concursos (19,7%). Estos dos últimos géneros crecen respecto ediciones
anteriores, sobre todo el de los concursos, que ha despegado entre las
preferencias de los televidentes en el último año: en 2013 eran elegidos
como programas preferidos por el 7,5% de los encuestados hasta casi el
20% de esta última edición. Un auge que se refleja en las audiencias
obtenidas por diversas competiciones sobre habilidades culinarias.
En conjunto, Antena3 es el canal con mejor programación para la mayor
parte de la audiencia andaluza (24%), seguido de Canal Sur TV (15,3%),
Telecinco (11,8%), LaSexta (10,7%) y La1 de TVE (9,4%), que ha bajado al
quinto lugar en la preferencia de la audiencia, a pesar de que en 2001
la televisión pública nacional se situó en el primer puesto. La
abundancia de programas del corazón es lo peor de la televisión para el
26% de los encuestados, seguida de demasiada publicidad (16,4%), en
tercer lugar se sitúa la manipulación informativa (señalada en primer
lugar por el 13%) y la mala educación (11,8%).
Mayoritariamente a favor de controlar la publicidad y los contenidos
En este sentido, una abrumadora mayoría (77%) responde afirmativamente
cuando se le pregunta si cree que debería limitarse la cantidad de
anuncios en televisión, y también asiente ante la necesidad de controlar
más los contenidos de los anuncios (70%). El Barómetro de este año
desvela además que una parte importante de los andaluces echa en falta
el reflejo de determinados colectivos sociales en televisión, un 37,6%
piensa así (un 44,4% cree que la televisión suele hablar de todos los
colectivos). Cuándo se les pide que identifiquen dichos colectivos, la
mayoría se decanta por las personas sin hogar, en situación de
marginalidad o de pobreza.
Como cada año, el Barómetro consulta a la ciudadanía sobre la
necesidad de regular los contenidos audiovisuales y la publicidad por
parte de una institución pública, a lo que un 78% responde que sí: un
23,8% dice que es algo necesario, un 27% que es algo bastante necesario,
y otro 27% que es algo muy necesario.
Las funciones que los andaluces atribuyen a un órgano regulador
público de los contenidos audiovisuales son, sobre todo, de protección a
la infancia y de protección ante contenidos contrarios a la igualdad y
la dignidad de las personas (tareas mencionadas por el 25,5% y el 23%,
respectivamente). Le siguen la garantía del respeto al pluralismo con el
10,8% y la atención de quejas y sugerencias, con el 8,5%.
A pesar de este alto grado de concienciación de la audiencia ante la
responsabilidad de los medios y la necesidad de regulación externa, su
disposición a reclamar sigue bajando. Un 36,7% de los encuestados se
muestra dispuesto a poner una queja ante contenidos audiovisuales que
considere lesivos con derechos fundamentales, frente a un 61,5% que no
lo haría. La razón principal argüida para esta falta de motivación a
quejarse está en que no merece la pena o no hacen caso de las quejas
(41%). La falta de preocupación o interés ante estos incumplimientos es
la siguiente razón para no usar los mecanismos de los que dispone la
audiencia (22,2%).
Redes sociales, puerta de acceso a la información para los internautas
La relación de los andaluces con internet, que se consolida
definitivamente como medio de información y entretenimiento entre la
población andaluza por detrás de la televisión, llama la atención el
hecho de que las redes sociales se han convertido, a gran distancia, en
la aplicación más utilizada cuando de pasar el rato se trata. El 63,4%
de los internautas las seleccionan en primer lugar, seguida de la
consulta de vídeos en plataformas como YouTube o similares (22,3%),
juegos (12,5%) o descargas de contenidos (12%).
Las redes sociales también empiezan a jugar un papel definitivo a la
hora de acceder a la información online, donde los diarios digitales
están en primera posición de consulta (61%), pero Twitter y Facebook se
sitúan en siguiente lugar (42,2%) y acortan las distancias con los
primeros, que en la edición anterior era de casi 40 puntos, y en 2014 no
llega a los 19 puntos. Este dato coincide en el tiempo con el acuerdo
entre Facebook y seis grandes cabeceras periodísticas internacionales,
que publicarán directamente algunos de sus contenidos en esta red
social.